La agricultura tradicional requiere grandes espacios al aire libre y depende en gran medida de factores naturales como el suelo, el clima y la luz solar. Este método también implica el manejo de plagas y enfermedades, lo que ha menudo genera rendimientos inestables. Para mejorar las condiciones de cultivo, la agricultura moderna en suelo utiliza con frecuencia invernaderos con iluminación suplementaria en zonas con luz solar limitada. Sin embargo, estos sistemas pueden ser intensivos en mano de obra y no ofrecen un control preciso de factores clave como la temperatura, la humedad y los niveles de oxígeno, lo que los hace menos ideales para una producción eficiente.

Nuestras ventajas

Con nuestro Sistema de agricultura vertical, ya no estás limitado por la ubicación. Ya sea en azoteas, jardines privados, grandes embarcaciones, islas remotas o zonas fronterizas, nuestro sistema ofrece un control ambiental completo, incluyendo la gestión precisa de la luz, el oxígeno y la temperatura.
El diseño vertical de múltiples capas ahorra espacio valioso y ofrece cosechas constantes, superando al cultivo tradicional en suelo. Nuestro sistema es especialmente eficaz en entornos extremos, como desiertos o áreas no aptas para el cultivo, brindando una solución confiable y sostenible a los desafíos agrícolas.